El término parafilia denota
cualquier interés sexual intenso y persistente distinto del interés sexual por
la estimulación genital o las caricias preliminares dentro de relaciones
humanas consentidas y con parejas físicamente maduras y fenotípicamente
normales.
Los términos de parafilias, desviaciones sexuales o
trastornos de la inclinación sexual hacen referencia a una serie de
comportamientos sexuales caracterizados por la excitación del sujeto ante
objetos o situaciones que no forman parte de los patrones sexuales normativos,
o porque el sujeto necesita para obtener placer la presencia de determinados
estímulos que se apartan de lo que se consideran estímulos sexuales normales.
Sin embargo, no todas las culturas definen un mismo
comportamiento como normal. Un criterio a tener en cuenta a la hora de
establecer la normalidad-anormalidad es el grado en que estas conductas
interfieren el ajuste sexual de la persona dificultando el establecimiento de
las relaciones sexuales satisfactorias.
Otro aspecto
fundamental es si éstos representan una agresión o peligro para el que lo
practica, o para el que es objeto de la práctica o para ambos. En este sentido,
un subgrupo de estas conductas se caracteriza por ser comportamientos
coercitivos que transgreden la libertad de la otra persona, p.ej., el
voyeurismo, el exhibicionismo, el froteurismo, la paidofilia...Estas conductas
reciben el nombre de ofensas sexuales,
y son consideradas legalmente delitos.
Referencia
bibliográfica
Belloch, A., Sandín, B., & Ramos, F. (2011). Manual
de psicopatología. Volumen II. Madrid: McGrawHill.
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